Calores causan dos muertes en Rivas

El rivense Luis Antonio Baltodano Cano, de 22 años, murió la tarde del miércoles de un infarto que se cree fue provocado por las altas temperatura que se registran en el país, y que se han sentido considerablemente en el departamento de Rivas, uno de los más calurosos del territorio por su ubicación en la franja del Pacífico.

“A eso de las 1:30 p.m. de ayer (miércoles), él (Baltodano Cano) se encontraba solo en la casa en compañía de la doméstica, a quien le manifestó que se sentía acalorado y que se iba a bañar, pero cuando salió del baño cayó al suelo, lo trasladamos al Hospital ‘Gaspar García Laviana’, de Rivas, donde el médico de turno nos informó que ya estaba muerto”, relató Jaqueline Cano Saballos, tía de la víctima.

Cano contó que antes de trágico suceso el joven había conversado por teléfono con su novia, quien habita en Sébaco, y no le manifestó de ningún malestar. Asimismo, destacó que la muerte repentina de Baltodano Cano los sorprendió, porque nunca presentó esos problemas de salud.

Del joven Baltodano Cano, sus familiares contaron que fue un destacado deportista, y que tenía planes de instalar un negocio propio.

Cano Saballos indicó que el médico forense les manifestó que la víctima pereció debido a problemas de la “presión”.

Otra víctima

Otro fallecimiento asociado a las altas temperaturas fue el del señor Miguel Ángel Núñez Alvarado, de 70 años y habitante del barrio Las Piedras, en Rivas, quien pereció el domingo 27 de abril, a consecuencia de un infarto, cuando se encontraba animando unas corridas de toros en la comunidad indígena de Veracruz del Zapotal.

Geraldin Núñez, hija del difunto, indicó que este era una persona propensa a ser afectada por las altas temperaturas, porque desde 1990 tenía instalada en su corazón una válvula artificial, y por eso dijo no descartar que el clima caluroso haya incidido en el deceso de su padre.

Factor de riesgo

El doctor Malcom Fisher, especialista en cardiología, explicó que es normal que las altas temperaturas alteren el metabolismo del ser humano, y que esto afecte los niveles de azúcar en la sangre y la presión arterial.

Expresó que ante esta situación es conveniente evitar el consumo de alimentos “enlatados” con alto contenido de sal y de persevantes, sobre todo por parte de aquellas personas que padecen de hipertensión o diabetes.

“Los pacientes que sufren estas enfermedades crónicas deberán visitar al médico, y si sus parámetros no están bien, reorientar las dosis de medicamentos”, recomendó.

Fisher dijo que es importante el consumo de agua, sin embargo, esto deberá ser bajo vigilancia médica para aquellos pacientes con problemas cardiacos, advirtió, argumentando que esos pacientes deben “ser más estrictos, pues no es lo mismo ser solo hipertenso”, aclaró.

Casos se incrementan

El especialista dijo que un importante porcentaje de la población está padeciendo de enfermedades crónicas como la hipertensión, diabetes y problemas cardiacos. Solo en el caso de la diabetes se habla de un registro del 12 al 15% de la población, y se calcula que en 20 años este registro crecerá hasta un 25%.

Por otro lado, cada vez, personas más jóvenes están padeciendo de estas enfermedades, registrándose pacientes de 30 años con problemas de hipertensión, cuando esta enfermedad comúnmente afecta a mayores de 40 años. Todas estas enfermedades están estrictamente asociadas a los hábitos alimenticios, y esto se refleja en los crecientes porcentajes de personas con problemas de obesidad o sobrepeso, comentó el doctor Fisher.